Un embarazo múltiple es la gestación en la que se desarrolla más de un feto, como resultado de la fecundación de dos o más óvulos o cuando un óvulo se divide.
Tipos
Gemelos dicigóticos o bivitelinos (mellizos)
Son el resultado de dos óvulos fecundados por dos espermatozoides que han formado dos cigotos. Cada uno se implanta de forma independiente, dentro de su saco vitelino con su propia placenta y bolsa amniótica. Pueden ser o no del mismo sexo.
Gemelos monocigóticos o univitelinos
El cigoto se forma por la unión de un óvulo y un espermatozoide que tras la fecundación se divide para crear dos embriones. Pueden ser:
- Bicoriales y biamnióticos: La división se produce en los 3 días próximos a la fecundación. Cada embrión crece dentro de su propia bolsa amniótica y se alimenta de su propia placenta.
- Monocoriales y biamnióticos: La división se produce entre el cuarto y séptimo día tras la fecundación. Comparten la misma placenta pero cada embrión crece dentro de su propia bolsa amniótica.
- Monocoriales y monoamnióticos: La división del cigoto se produce tardíamente (entre el séptimo y treceavo día). Comparten placenta y bolsa amniótica, siendo el embrión lo único que se divide. En este tipo de embarazo suelen ser más frecuentes las complicaciones.
También puede ser un embarazo de trillizos, cuatrillizos... pero es mucho menos frecuente que los dos casos anteriores.
El riesgo de los embarazos múltiples reside en el gran volumen que ocupa la gestación de más de un bebé. El útero soporta un exceso de peso y puede distenderse ejerciendo más presión sobre el resto de órganos. Gestar a dos o más bebés implica una placenta mayor y un aumento de los niveles hormonales en sangre de la madre.
Entre las complicaciones más comunes:
Aumento de peso: en un embarazo único, lo normal es aumentar unos 11-13 kg. Sin embargo, la gestación de gemelos o mellizos supone un aumento de unos 15-20 kg en la futura mamá. Esto dificultará el movimiento de la madre y además, presentará dificultad para dormir, mayor fatiga, etc.
- Preeclampsia: hipertensión arterial inducida por el embarazo. Esto ocurre en el 15-20% de las mujeres con gestaciones múltiples y supone una frecuencia de tres a cinco veces mayor que en un embarazo único.
Complicaciones en el feto
- Síndrome del gemelo evanescente: Se trata de la pérdida de uno de los fetos durante las primeras semanas de embarazo, lo cual es bastante frecuente en los embarazos múltiples.
- Síndrome de transfusión feto-fetal: Consiste en un trastorno de la placenta que se desarrolla únicamente en los gemelos idénticos. Comunican sus vasos sanguíneos y puede ocurrir que uno de ellos recibe un exceso de sangre mientras que el otro sufre una deficiencia.
- Defectos congénitos y retraso del crecimiento: Los bebés nacidos de embarazos múltiples tienen el doble de riesgo de sufrir anomalías congénitas.
Riesgos de parto múltiple
- Placenta previa: Como consecuencia de la presencia de más de una placenta o de una placenta de mayor tamaño, es posible que su posición no sea la correcta y se coloque en la parte baja del útero.
- Parto prematuro: La duración media de un embarazo gemelar es de 36 semanas, es decir, antes de término.
Para saber más:
